Me gustan los tips que compartes, Sergio, pero respecto a las causas, creo que muchas veces culpamos demasiado al individuo, como si las mermas en productividad fueran siempre de su entera responsabilidad.
Creo, en ese sentido, que también debemos prestar atención a las causas sistémicas, como la ética del trabajo y la estética de consumo de nuestra cultura neoliberal, que en realidad vuelven "tentadoramente" (más) fácil procrastinar:
Daniel: en el entorno siempre van a existir los elementos distractores; independientemente de la cultura donde nos desenvolvamos, es el individuo quien debe mantener el foco en aquellas actividades que le llevan a alcanzar sus objetivos. Los teléfonos no piensan ni deciden solos; son las personas que los usan las que se vuelven adictas a ellos.
Efectivamente las decisiones son siempre personales e intransferibles. Somos responsables de ellas. Pero los valores que los modelos de sociedad imponen no son precisamente meros elementos distractores. Lo que sí es cierto, y en eso compartimos, es que somos nosotros quienes debemos reflexionar y hacernos cargo de nuestras acciones y hábitos.
El lago del café sería mi lugar preferido 😅
Me gustan los tips que compartes, Sergio, pero respecto a las causas, creo que muchas veces culpamos demasiado al individuo, como si las mermas en productividad fueran siempre de su entera responsabilidad.
Creo, en ese sentido, que también debemos prestar atención a las causas sistémicas, como la ética del trabajo y la estética de consumo de nuestra cultura neoliberal, que en realidad vuelven "tentadoramente" (más) fácil procrastinar:
https://pequen.substack.com/p/akrasia-o-la-victoria-de-tanatos
Daniel: en el entorno siempre van a existir los elementos distractores; independientemente de la cultura donde nos desenvolvamos, es el individuo quien debe mantener el foco en aquellas actividades que le llevan a alcanzar sus objetivos. Los teléfonos no piensan ni deciden solos; son las personas que los usan las que se vuelven adictas a ellos.
Efectivamente las decisiones son siempre personales e intransferibles. Somos responsables de ellas. Pero los valores que los modelos de sociedad imponen no son precisamente meros elementos distractores. Lo que sí es cierto, y en eso compartimos, es que somos nosotros quienes debemos reflexionar y hacernos cargo de nuestras acciones y hábitos.
Saludos desde Chile, Sergio.
Te sigo leyendo.